Tipo: Liquidación
Importe de la liquidación: $ 150.000
Fecha: Marzo, 2011
Mediador: Brian Mone
Lesiones alegadas: muerte por negligencia
Resumen del caso:
La fallecida, de 69 años, fue encontrada muerta al día siguiente de enterarse de que los árboles que bordeaban su propiedad habían sido cortados. La demandante alegó que el demandado, que era el dueño de la propiedad que colindaba con la de la difunta, había contratado a alguien para que quitara los árboles y que éstos no estaban en su propiedad. Los árboles habían sido plantados 40 años antes por la fallecida y su marido. Los vecinos de la difunta, así como su hijo, testificaron que la difunta estaba visiblemente disgustada tras enterarse de que los árboles habían sido cortados.
El experto médico de la demandante opinó que, aunque no se había realizado una autopsia, dadas las circunstancias de su repentina muerte, probablemente murió de un ataque al corazón o de un derrame cerebral y que el estrés causado por la noticia de que los árboles que había plantado con su marido habían sido talados fue un factor que contribuyó sustancialmente a su muerte. El cardiólogo de la demandada testificó que no había pruebas que sugirieran que su muerte fue causada por ese estrés.
El demandado afirmó que había contratado a alguien para limpiar el patio trasero, no para quitar los árboles, y que no se había cortado ningún árbol de la propiedad del difunto. El demandado también afirmó que los árboles estaban en su propiedad. El demandante respondió que incluso si los árboles estaban originalmente en la propiedad vecina, el difunto había poseído el terreno de forma adversa en los 40 años transcurridos desde que se plantaron los árboles.
Además de la indemnización por homicidio culposo, el demandante también solicitó daños y perjuicios por el coste de los árboles, de conformidad con M.G.L. c. 242 7, que permite triplicar los daños y perjuicios cuando "una persona que, sin licencia, tale intencionadamente, se lleve, ciña o destruya de cualquier otro modo árboles, madera, leña o sotobosque en los terrenos de otra persona".
La difunta tenía tres hijos adultos que no dependían económicamente de ella, uno de los cuales vivía con ella en ese momento y dos que vivían fuera del estado. Las partes llegaron a un acuerdo por $150.000.