No necesita un abogado para el proceso de la Seguridad Social. Sin embargo, un abogado es muy útil durante todo el proceso de la Seguridad Social. Es fácil cometer errores al rellenar la solicitud inicial del SSDI. El primer paso requiere mucho papeleo, información personal, así como registros médicos.
Un abogado aumenta las posibilidades de aprobación. También puede ayudar en el proceso de apelación si le deniegan las prestaciones. La información de su solicitud inicial permanecerá en su reclamación durante todo el proceso. Dicho esto, es importante que su información sea completa y precisa antes de presentarla.
Es habitual cometer errores u omitir información necesaria al rellenar la solicitud inicial. Contar con un abogado que le guíe a través de los diferentes pasos del SSDI puede ser extremadamente útil y beneficioso.
Si decide contratar a un abogado, él/Sólo se le pagará en caso de que se le concedan prestaciones.