El estrés es un estado de tensión mental o emocional resultante de circunstancias adversas o muy exigentes. Cada persona responde de forma diferente a los acontecimientos estresantes. A veces, las personas desarrollan reacciones físicas temporales para manejar las situaciones estresantes, como la aceleración de los latidos del corazón o el aumento de la presión arterial. Sin embargo, algunas personas manejan el estrés de forma muy diferente y desarrollan problemas físicos o mentales duraderos. El estrés puede incluso agravar una enfermedad física o mental existente. Entre las enfermedades duraderas causadas por el estrés se encuentran los dolores de cabeza, los dolores de estómago, el insomnio, la depresión, la ansiedad y otras innumerables afecciones.
Discapacidades emocionales
Admitámoslo, la mayoría de las personas experimentan algún tipo de estrés semanalmente, si no diariamente. Cualquiera que haya trabajado está familiarizado con la serie de factores estresantes que acompañan al empleo. Tanto si eres una secretaria con exceso de trabajo como un camarero con horarios erráticos, probablemente hayas experimentado algún nivel de estrés como resultado directo de tu empleo. Sin embargo, algunos factores de estrés no son tan comunes. Por ejemplo, imagina a un profesor de instituto que desarrolla ansiedad porque los alumnos le acosan a diario, o a un empleado que desarrolla un trastorno de estrés postraumático tras ser agredido verbalmente por un compañero de trabajo. Estos ejemplos están muy lejos de ser ordinarios, pero ocurren con más frecuencia de lo que se puede suponer. Así que la pregunta es: ¿qué ocurre cuando un empleado se enfrenta a un acontecimiento o a una serie de acontecimientos en el trabajo que hace que los niveles de estrés del empleado aumenten y, como resultado, interfieran en su capacidad de trabajo?
La Ley de Indemnización Laboral de Massachusetts permite la recuperación por "discapacidades emocionales sólo cuando la causa predominante que contribuye a dicha discapacidad es un evento o una serie de eventos que ocurren dentro de cualquier empleo". Esto significa que el empleado tiene derecho a las prestaciones de compensación de los trabajadores si los acontecimientos en el lugar de trabajo son un factor primario o una causa real de una lesión emocional grave. El término discapacidad emocional se ha interpretado de forma amplia y abarca discapacidades como el trastorno de estrés postraumático, la ansiedad y la depresión. Esta interpretación amplia significa que un mayor número de empleados puede presentar reclamaciones para recuperar las lesiones emocionales causadas por eventos en el lugar de trabajo. Esto es una gran noticia para los empleados. Sin embargo, el término "causa contribuyente predominante" tiende a ser el núcleo de una disputa sobre lesiones emocionales. La aseguradora suele argumentar que una lesión emocional no es indemnizable porque no fue causada por eventos laborales, que fue una acción de buena fe del personal del empleador, y/o que había una condición emocional preexistente, no relacionada con el trabajo. Cuando se plantean estos argumentos, un abogado experto en indemnizaciones laborales buscará la ayuda de un psiquiatra, psicólogo u otro profesional médico cualificado para determinar si existe una relación causal entre la lesión emocional y los acontecimientos laborales.
¿Está estresado en el trabajo?
Si un acontecimiento no habitual en el lugar de trabajo repercute en su bienestar mental, debe acudir a un médico inmediatamente. Debe documentar el suceso o sucesos y notificar a su empleador tan pronto como se dé cuenta de que es sintomático. Algunas lesiones emocionales se desarrollan con el tiempo. En estos casos, documente sus síntomas tan pronto como se dé cuenta de su incapacidad. Lo más importante es que se ponga en contacto con un abogado de Keches Law Group para que le asesore sobre la conveniencia de presentar una reclamación de indemnización por accidente laboral. La cuestión es que la compensación de los trabajadores se ha ampliado desde los anticuados días en que la compensación se limitaba a las lesiones físicas. Hoy en día, con los desarrollos médicos en la salud mental, la ley ha evolucionado para reconocer que hay más que las lesiones físicas que se desarrollan en el lugar de trabajo. Si usted está leyendo este artículo y ha experimentado una lesión emocional en el trabajo por favor póngase en contacto con nuestra oficina para el asesoramiento de un abogado con experiencia en Keches Law Group para determinar si usted tiene derecho a la compensación de los trabajadores.
Si usted o un ser querido está sufriendo debido al estrés en el trabajo, póngase en contacto con Keches Law Group en 617-898-0808 o en línea para una consulta gratuita y sin compromiso hoy mismo. Estaremos encantados de reunirnos con usted en una de nuestras oficinas convenientemente ubicadas o en su casa.